Libro I

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"Hablo de los vigilantes y sobre el día en que bajarán y morarán la tierra apoderándose del alma de los que no creen en ellos. Y el hombre con su ejército, de hierro y madera, luchará y será traicionado por la corrupción de su propia alma. ¡Ruego por ellos y las almas venideras!" (ENOCH, (1:3))

Así inicia "Jaque Mate a la Reina" título de la primera entrega de la trilogía "El Mundo de Minerva" de la escritora chilena Nicole Barría y que pasará a formar parte de la saga de "Los Observadores".

Este libro catalogado según su creadora como; "Fantasía Oscura" narra la historia de Minerva Feneli una joven de quince años, que vive con el doloroso recuerdo de la muerte de su madre y la posterior huida de su padre (único sospechoso de este hecho). A pesar de esto Minerva parece una joven alegre y extrovertida, que cuenta con algunos atributos que la transforman en la típica heroína de libro (Es pelirroja, linda, carismática y con algunos aires de damisela en peligro)

En el transcurso de los primeros capítulos conoce a quien posteriormente se transformaría en su mejor amigo y confidente; Aquila Paún un joven de su misma edad, de aspecto promedio y vida promedio, con un prontuario de relaciones amorosas que rozan en lo tragicómico.

La vida de ambos personajes da un vuelco extraño cuando Minerva recupera un antiguo collar, que su madre le había dejado poco antes de morir y que había sido heredado de madre a hija por generaciones. Este collar, que posee varias habilidades místicas, indica a Minerva como la culpable de un destino apocalíptico; hecho que posteriormente llevará a ambos personajes a tomar posiciones opuestas.

Hasta aquí la historia es lo que podría llamarse típica, pero a medida que vas ahondando en los personajes y sus psicologías descubres que el "Mundo de Minerva" que acompaña al collar es muy similar al mundo oscuro de los suburbios, donde ni la magia escapa a la búsqueda del poder y al control de grandes corporaciones, grupos extremistas y guerras entre pandillas. Nadie en este mundo es lo que aparenta (ni siquiera los protagonistas) y las primeras impresiones no tienen valor.